Aunque me
invitaron a Miami, Everglades, San Agustín y Orlando… no vale la pena un viaje
para ir un solo día a Disney, pienso yo. Después de haber estado en Orlando y Miami,
y haber atendido a tantos clientes latosos de esa zona (por no decir otra
palabra), no me latió ir para allá. Como no conozco ninguno de estos lugares a
los que fui, decidí echarme esta aventura solo.
Texas: Me gusto El Paso, fuera de que
no hay bosque, hay montaña (cosa que no tienen Dallas-Fort Worth, Houston,
Austin o San Antonio), hay dos moles con Macy’s y unos outlets.
El centro tiene
áreas bonitas. La foto de arriba me recuerda a la colonia Obispado en Monterrey.
Nuevo Mexico: Lo sorprendente de Nuevo México es que no parece
Estados Unidos, se parece más a México. Casi no vi una sola bandera americana, aunque todo mundo hablaba inglés. Según la
Wikipedia, es el estado más latino de Estados Unidos, solo que en
Alamogordo casi no vi latinos, y en Santa Fe no parecían ser la gran mayoría,
aun contando aquellos que parecían ser descendientes de españoles.
A una hora y media al noreste de El Paso está Alamogordo:
A una hora y media al noreste de El Paso está Alamogordo:
Media hora hacia la montaña el desierto cálido se
transforma en un bosque de pinos y árboles sin hojas (ya con frío). Esto me
dice que tengo que regresar en otoño para ver el paisaje verde mezclado con
amarillo, naranja y rojo:
Media hora hacia el poniente de Alamogordo está White Sands National Mounment, un
desierto de arena blanca. A menos de 5 minutos de Cloudcroft se alcanza a ver
este lugar desde lejos:
Después de dar unas veinte vueltas en carreteras de un lado hacia otro llegas a
Santa Fe (no es como en Texas, que agarras una autopista y si acaso otra para
llegar de un lugar a otro):
A unos 40 minutos de Santa Fe esta Española
(escrito con eñe), y una hora y media después llegas a Angel Fire. Como no se
esquiar solo me subí al carrito para tomar fotos. Se me hizo raro que no
hubiera cinturón de seguridad, con eso de que acá en EU siempre la seguridad es
primero. Estaba el solazo y como no tenía pensado subir, solo llevaba una
sudadera y en el camino de bajada, con el aironazo que hacia sentí que los
dedos se me congelaban, así que tuve que abrazar el tubo con el codo, mientras
que con el otro codo detenía el tripié con la cámara. Tenía las manos dentro de
la sudadera para que no se congelaran:
De regreso a Texas: Amarillo parece
llamarse así porque todo alrededor crece puro zacate amarillo (a lo mejor verde
después de que llueve). Tiene al igual que Lóboc sus freeways, su mol y hasta una tienda de artículos católicos.
Lo único que extrañé fue el ir con gente.